Un buen ejemplo de ello son los carteles del Teatro Municipal o los del plan PREAC, así como otras campañas que realiza y financia la concejalía de Comercio , o la de Turismo.
En esa misiva intimidatoria, enviada por el Ayuntamiento de Calahorra a sus asociaciones, se afirma que son precisamente:
“las asociaciones locales que son mayormente las que pegan carteles en sitios indebidos , por lo que se obrará en consecuencia”Los carteles que anuncian cazuelillas, rutas teatralizadas, actuaciones en el Ideal o el dichoso PREAC, inundan las paredes y fachadas, por toda la ciudad (especialmente en el Casco Antiguo y son colocados sin cabeza. No respetan una normativa que ahora se recuerda a los demás que han de cumplirla a rajatabla.
Por otra parte, el propio Ayuntamiento -en boca de su concejal de limpieza-, rechazaba hace unas semanas una propuesta socialista para colocar más paneles y rollos publicitarios en los que asociaciones y administración pudieran colocar su cartelería.
Al final, lo que se desprende de cosas como estas, es que habita un despotismo deslustrado en nuestros gobernantes. Unos dirigentes políticos que han terminado por interiorizar que después de 20 años en el poder, pueden hacer lo que les de la puñetera gana.
Paradójicamente, el concejal de limpieza, exige al resto lo que él mismo no cumple. Sus carteles ensucian fachadas públicas y privadas, se colocan fuera de los lugares habilitados, y no se sanciona a la empresa anunciadora que son precisamente sus propias concejalías.
Pues como son en ayto y ellos mandan a dar por culo como siempre
ResponderEliminarY recordaría yo aquel obrero en paro, al que le pusieron 90 euros de multa el Pepe Ibañez por poner un cartel buscando empleo, con celo en una farola, No hace ni tres años de eso
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