El salario de los irresponsables.

Nadie en su propia empresa pagaría a sus empleados por un trabajo que no desempeñan… ¿Verdad?. Pero la administración pública no es una empresa cualquiera, no. Precisamente una de las excusas que se agitan a la hora de refrendar sueldos escandalosos, es que lo son en proporción a la responsabilidad que han de soportar...Pero, no es cierto.

Saltan con asiduidad a la opinión pública casos asombrosos en los que los altos cargos y también algunos miembros de las élites funcionariales ( siempre que hay que solucionar problemas o depurar responsabilidades) resultan finalmente irresponsables de cualquier cosa que suceda, aunque la misma -supuestamente- quede bajo su área de responsabilidad.
Los altos cargos van y vienen con los cambios de gobierno, pero los directivos de las empresas públicas y las élites funcionariales se agarran, afianzan y prosperan en la Administración.
Por su proximidad a los órganos directivos, o directamente por formar parte de ellos, mejoran sus condiciones laborales y salariales aprovechando las coyunturas que se plantean.

Hace unos días saltó la noticia de que el Gobierno del PP, pretende en su proyecto de ley de presupuestos para el 2015 una subida del sueldo en un 3,2% que sólo aplicaría a unos pocos privilegiados: los altos directivos del Estado, mientras seguirá en vigor la política de congelación salarial al resto de funcionarios por quinto año consecutivo. En dicho proyecto de ley se incluye una partida de 612,82 millones de euros para alta dirección, los beneficiados serán cargos políticos y asesores de los ministerios y otros organismos de la Administración Central, así como los altos directivos de las empresas públicas del Estado.


Ana Mato (Ministra de Sanidad del Gobierno) , en la reciente crisis del Ébola que su propio gobierno ha desencadenado, salió el lunes a dar explicaciones ante los medios de comunicación parapetada tras seis altos cargos políticos y funcionariales , que la protegieron. Esta guardia pretoriana (con salarios de escándalo) contestó incluso las preguntas que iban dirigidas a la propia ministra.
Se juntaron en la misma mesa algunos de los mayores responsables de la chapuza del Ébola, (no todos) pero nadie parece asumir lo que lleva aparejado su estratosférico sueldo…La responsabilidad. Al final, se llega a un habitual consenso….La responsable final parece que es la ATS, que se infectó. El último mono de la cadena es el culpable, y de no ser por la opinión pública la sacrificarían como ya han hecho con su perro.

Tras decenas de muertos, heridos y páginas en la prensa, finalmente el descarrilamiento del tren Álvia en Santiago de Compostela, se va a sustanciar con el conductor del tren sentado en el banquillo de los acusados, como único imputado por el accidente. Todo el rosario de altos cargos de RENFE, ADIF y del Ministerio de Fomento han ido escurriendo el bulto con el visto bueno del juez instructor. La justicia ha llegado a la conclusión de que el único responsable de lo sucedido es el conductor….Casualmente el último mono de la cadena (con permiso del revisor).

En 2003 sucedió algo muy parecido con el accidente aéreo de Yak 42 en el que perdieron la vida 62 militares españoles. La odisea judicial celebrada tres años después comenzó con la imputación de seis altos mandos, que ni fueron procesados ni condenados, pese a ser los responsables directos de la contratación del avión y de la integridad de las personas a sus órdenes.
Tampoco Federico Trillo (Ministro de Defensa) asumió su responsabilidad, y siguió con su puesto y su sueldo.
Según la sentencia, el ingeniero de vuelo (ucraniano creo) tenía caducado su certificado profesional y médico, y el registrador de voz de la cabina de pilotaje (que también sería ucraniano) no tenía datos y estuvo inoperativo durante los 45 días anteriores al accidente. Esos fueron los responsables y como ya estaban muertos…No hubo que meter a nadie en la Cárcel. Trillo de embajador a Londres y los altos mandos militares de rositas.

Y qué no decir del famoso Prestige, el petrolero que causo el gran desastre en las costas gallegas, en cuyo juicio solamente se condenó al capitán del Barco a una irrisoria pena de 9 meses de cárcel que no cumplió. Un capitán que si por algo se alejó de la costa fue por orden de los altos funcionarios del Gobierno de España y de la Marina Mercante.
Ni el entonces ministro –Álvarez Cascos-, ni el vicepresidente Rajoy, ninguno de sus altos cargos y funcionarios dieron la cara, ni asumieron responsabilidad política o penal alguna. Después de 10 años del desastre quedó demostrado que en España los altos cargos y funcionarios de “Clase vip” no son responsables de nada aunque cobren un pastizal supuestamente por la responsabilidad que han de asumir.

Tenemos viviendo como marqueses -a costa del dinero público- a toda una legión de altos cargos designados a dedo, (eso se dice siempre) pero también de funcionarios elitistas...Gestores y directivos de empresas públicas que por aquello de medrar junto a “la teta de la vaca” están percibiendo salarios de 50.000 y hasta más de 65.000 euros anuales. Funcionarios de la Administración Local que cobran mucho más que los propios alcaldes de sus municipios, de la autonómica que superan a los presidentes de Comunidad Autónoma y de la Administración del Estado que cobran más –incluso- que los ministros del mismísimo Gobierno de España.

Algunos de estos privilegiados se dedican con especial interés - buena parte de su jornada laboral- a eludir todo aquello que les pueda suponer asumir la más mínima responsabilidad, para la cual precisamente se les está pagando semejantes sueldos, permitiéndose incluso la desfachatez de chulear a quienes desde la legítima representación de los ciudadanos les piden cuentas de su gestión y su trabajo.