viernes, 15 de mayo de 2015
Una ciudad sucia según sus habitantes
La limpieza es fundamental para una convivencia en cualquier ciudad.
Normalmente a esta importante parcela de la gestión municipal se destinan cuantiosas partidas económicas.
Existen dos modelos de gestión del servicio de limpiezas, el público y el privado.
En la ciudad de Calahorra, se percibe un problema grave y crónico de suciedad, pero no lo digo yo (que también), lo afirman los propios habitantes.
Según el último pliego acordado con el Ayuntamiento con la empresa FCC, estos perciben anualmente 541.640 euros por la limpieza viaria, cantidad que en situaciones excepcionales, campañas determinadas, etc. puede verse aumentada. La adjudicación de este servicio fue aprobada en septiembre del pasado año con los votos a favor del Partido Riojano, UPyD y el Partido Popular. Únicamente el Partido Socialista no apoyó esta contratación.
Desde ese momento y hasta el día de hoy, la calidad del servicio ha empeorado, y la empresa FCC presta un controvertido servicio, en el que ninguna responsabilidad tienen sus trabajadores, que han asistido a un deterioro importante de sus condiciones laborales y a un menoscabo de sus ingresos, cobrando nóminas inferiores a las que su colectivo percibe en otras ciudadades y soportando sobre sus cabezas la posibilidad de amortización de plazas, reestructuración de plantillas y recortes salariales….Todo en aras de una mayor efectividad que es tan falsa como inexistente.
Ayer mismo, cansado de ver una papelera rebosante de porquería en la calle Pastores, se me ocurrió colgar unas fotografías de la misma en el Facebook de los Amigos del Casco Histórico de Calahorra.
La papelera en cuestión llevaba 13 días sin ser vaciada, pese a encontrarse completamente a rebosar. Olía a putrefacción ya que probablemente en su interior contenía restos orgánicos y el olor era insoportable. Para colmo, algún desaprensivo había colocado en su parte superior (hacía ya tres días) un envase de aceite de coche de color rojo….Vamos, que la papelera daba al ojo.
Esta mañana por fin alguien había pasado a vaciar la papelera dichosa. 13 días después de estar llena.
Este es el servicio de limpieza que tenemos. Dinero público que se lleva una empresa privada por dar un servicio lamentable. Dinero público para que mantengan a sus empleados en una condiciones salariales y laborales francamente preocupantes. Dinero público es también el que cobra Pepe Ibáñez (PP) por ser concejal de limpieza y liberado, que tiene la ciudad llena de suciedad. Un gran éxito.
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El titular es absolutamente engañoso... Realmente debería ser "Una ciudad MUY sucia, según sus habitantes".
ResponderEliminarSaludos, camaradas progresistas.