Murió de varios disparos de los cuales uno impactó en la cabeza. Los pistoleros (parece ser que dos) dejaron siete casquillos de bala y un muerto en el suelo del local.
Fernando a parte de Agente Forestal hacía las veces de corresponsal para el periódico el Diario Vasco, lo que sin duda no era del agrado de la banda terrorista, que como por todos es sabido fundamentaba su ideología en la eliminación de cualquier voz discordante con los planteamientos fascistas que le daban sostén ideológico.
Fernando era de derechas (según se comentaba en el pueblo) y nacido en Sevilla. Al ser asesinado contaba con 53 años de edad y se encontraba soltero. El entorno terrorista de la mal llamada “Izquierda” nacionalista justificó su asesinato afirmando que actuaba como confidente de la Guardia Civil. Entonces se solía decir “algo habrá hecho”. Eran malos tiempos para la libertad de expresión en Euzkadi y ese mismo año fueron asesinadas por ETA varias decenas de personas.
la banda terrorista emitió un comunicado justificando el crimen en el cual afirmaban lo siguiente:
"Fernando Espínola pertenecía a dicha estructura colaboracionista actuando en la sombra desde su heterogénea actividad pública como guarda forestal y corresponsal de prensa".
A Fernando lo enterraron en su población natal, pese a que llevaba 15 años destinado en Oyarzun. Ahora tiene una calle dedicada en su pueblo, y el magma social que apoyó y justificó estos asesinatos, un muerto más sobre su conciencia.
Un año antes del asesinato de Fernando Rodríguez, -concretamente el 2 de octubre de 1978-, otro Agente Forestal perdía la vida a manos de ETA. En la localidad guipuzcoana de Lizarza, Ramiro Quintero era asesinado mientras se encontraba en un puente mirando el río, camino de su domicilio.
Ramiro estaba casado y era padre de seis hijos, dos de ellas -según cuentan las crónicas- fueron las primeras que junto a su madre acudieron a socorrer al Agente Forestal.
A última hora de la noche del lunes 2 de octubre de 1978 la banda terrorista ETA asesinaba en Lizarza (Guipúzcoa) al guarda forestal RAMIRO QUINTERO ÁVILA. Previamente, desde el mes de julio de ese año varios miembros del grupo Uzturre de ETA habían sometido a vigilancia los movimientos de su víctima, lo que les permitió conocer que solía frecuentar el Bar Leku Alai de la localidad, situado justo debajo de su domicilio, en la llamada Casa de Zubiaurre. Con esta información, el 2 de octubre robaron un coche a mano armada en Villafranca de Ordicia con el que los asesinos de la banda se trasladaron al puente de Larraenea sobre el río Araxes, a ocho kilómetros de Tolosa, y muy próximo al bar que solía frecuentar la víctima. Esa noche, Ramiro salió del bar acompañado por unos amigos, entre ellos José Antonio Olano Ormaechea, entonces alcalde de Lizarza, que contó que "antes de subir a su casa, al salir del bar, solía asomarse al río Araxes, sobre el puente Larraenea, que está al lado justo del bar" (ABC 03/10/1978)
Ramiro contaba con 59 años de edad cuando le quitaron la vida, y estaba al cargo de una piscifactoría. Era Agente Forestal del Estado desde 1947, con diferentes destinos en Canarias – de donde era natural- y cuando se aproximaba al final de su carrera lo habían destinado en Lizarza. No era una persona con inquietudes políticas conocidas y su pasión era la naturaleza. Solamente llevaba año y medio destinado en Euzkadi y se encontraba esperando traslado de destino . Fue enterrado en Tenerife.
Los miembros del comando que lo asesinó -según las investigaciones policiales certificaron- fueron José Manuel Arzallus Eguiguren, alias Casero (a mitad de los 90 estaba en prisión y se benefició de las políticas de acercamiento de presos etarras que puso en marcha el Partido Popular de José María Aznar) , Martín Sansebastián Aguirre (andaba hace unos años por Venezuela), Miguel Lopetegui Larrarte (se suicidó ahorcándose en la cárcel de Herrera de La Mancha)…y Pedro Goñi Lizarza . A este último se le vio en octubre de 2013 en el sur de Francia tomando vinos con otros seis fugitivos etarras… Es el del jersey claro en el centro de la imagen que difundió la prensa...Parecen contentos.
Malnacidos, criminales...
ResponderEliminarMenudos cobardes y fanáticos irracionales los del comando de ETA que asesinaron a este agente forestal; ¿por qué decidieron quitarle la vida?, ¿qué peligro podía suponer para la organización terroristas alguien como Ramiro Quintero Ávila?
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