Izquierda Unida y el circo de los animales hacinados.

Desde que comenzó esta legislatura (junio de 2015), la formación Izquierda Unida ha venido mostrando un singular clima de entendimiento con el Partido Popular de Calahorra, lo cual no es algo subjetivo, sino que se desprende principalmente de la buena sintonía entre ambas formaciones políticas a la hora de aprobar los presupuestos anuales para los ejercicios 2016 y 2017.
La formación comunista ha colaborado activamente para que dichos presupuestos salgan adelante adoptando la abstención (al igual que Ciudadanos) como una fórmula ambigua de no posicionarse contra la filosofía de gasto que la derecha propone, al tiempo que conseguir que alguna de sus propuestas cuenten con la financiación que el propio Partido Popular les cede a modo de contraprestación.

Es una fórmula legítima, que Izquierda Unida aprovechará hasta que se acerquen las próximas elecciones municipales. Una estrategia como otra cualquiera.
Para los presupuestos de 2019, votarán en contra sean cuales sean…Me juego una caña para todos.
Pero esta excelente predisposición de IU no es correspondida por el Partido Popular ni por el alcalde Portillo, que no desaprovecha ocasión alguna para ningunear a esta formación política.

El último caso de esto que comento cuelga ahora mismo de las farolas de la ciudad. Portillo ha autorizado la instalación en el aparcamiento de la Catedral, de un circo con animales,( el Coliseo) pese a que el Pleno del Ayuntamiento de Calahorra aprobó por mayoría absoluta en sesión celebrada el pasado mes de abril de 2016 declarar Calahorra como un municipio libre de circos con animales. Una propuesta que impulsó la propia formación comunista y que salió adelante gracias al apoyo de PSOE y PR. Por el contrario PP votó en contra de la prohibición y Ciudadanos se abstuvo.

La autorización para que este circo actúe en la ciudad que ha otorgado el Partido Popular es contraria a la voluntad ciudadana que así fue manifestada en el pleno por sus representantes, por tanto contraria a la democracia municipal, y denota el absoluto desprecio que Portillo siente por las propuestas de Izquierda Unida, y ya de paso por los derechos y el bienestar de unos animales que viven una miserable existencia recluidos y explotados de por vida.

Tendrá que ser la Ley que en estos momentos estamos tramitando en el Parlamento de la Rioja (a propuesta de APA Rioja y 24.000 riojanos y riojanas con su firma), la que ponga punto y final a los circos con animales en esta Comunidad. Una ley que estará aprobada antes de que finalice el año y que servirá para que la gente sin escrúpulos (que tanto abunda) no puedan seguir explotando y maltratando a los animales… Ni tampoco dando autorizaciones administrativas como coartada para que otros lo hagan.

Mientras llega…Pasen y vean el circo calagurritano.