Pedro Sánchez impide el despilfarro en cohetes del Ayuntamiento de Calahorra

Seguro que en alguna ocasión han escuchado aquello de que en el planeta todo está interrelacionado, y que el simple aleteo de una mariposa en un extremo del mundo puede generar un viento que termine convirtiéndose en huracán a miles de kilómetros. Puede parecer una exageración, (y seguramente lo sea), pero lo que está demostrado sin ningún género de duda es que cualquier acción genera una reacción.

El anuncio realizado por Pedro Sánchez el pasado mes de febrero de que convocaba elecciones generales para el 28 de abril ha sido un buen ejemplo de esas acciones que generan infinidad de reacciones.
Una de ellas es que el adelanto electoral va a impedir que Luis Martínez Portillo (alcalde de Calahorra) se gaste 5.500 euros en inaugurar la Plaza de la Verdura quemando una colección de fuegos artificiales. Un desvarío nacido en su cabeza y en la de su concejal de despilfarros y excentricidades varias (Sr. Eguizábal), que ya habían anunciado y que ahora no podrán llevar a cabo porque el adelanto electoral impide que los gobiernos de la nación, autonómicos y municipales realicen ningún gasto en autobombo, propaganda, inauguraciones etc.
Por este motivo, y no por otro, se les ha estropeado la ocurrencia de festejar con fuegos artificiales su propia incompetencia; celebrar que tras 25 años de abandono tuvieron que arreglar de urgencia una plaza que se venía abajo. Querían alardear quemando 5.500 euros su propia desidia y estaban muy dispuestos a hacerlo. Increíble pero cierto.

Pese a que el anuncio de esa intención generó un rechazo unánime entre la ciudadanía (entre asombrada e indignada), el Partido Popular en el Ayuntamiento de Calahorra siguió adelante con la tramitación administrativa destinada a adquirir el lote de 5.500 Euros en cohetes para inaugurar las obras inacabadas de la Plaza de La Verdura, dando tramitación a la misma en Junta de Gobierno en el mes de enero, en una licitación compuesta por dos lotes, el primero para fiestas de agosto por un importe de 27.681 euros y el segundo para inaugurar las obras de la plaza por un importe de 5.500 Euros.

Tras la polémica creada y la reacción en contra de la ciudadanía, siguieron adelante incluso mintiendo para justificarse (tal es su costumbre) afirmando que era una obligación hacer la quema de fuegos artificiales “para que el ciudadano vea las actuaciones realizadas con fondos europeos”, lo cual es absolutamente falso, al tiempo que ridículo.

El órgano de contratación del Ayuntamiento para desarrollar esa licitación propuso la adjudicación de ambos lotes. Les dio el visto bueno a espera de su aprobación definitiva por la Junta de Gobierno.

Pero el pasado lunes 4 en un acuerdo de esa misma Junta de Gobierno, el PP aprobó la adjudicación únicamente del primer lote, pero no  la adjudicación del segundo lote. ¿Por qué? Pues muy sencillo; a partir de ayer día 5 de marzo (fecha de la convocatoria de elecciones) , tal y como recoge el artículo 50.3 de la Ley Electoral, está absolutamente prohibido el autobombo, la presentación de proyectos y las inauguraciones por parte de la administración…Y claro, dejarlo contratado para después de las elecciones municipales ya no les ha parecido interesante ni rentable para sus intereses.