No entiendo el revuelo que algunos profesores/as -objetores de conciencia- han mostrado a la “educación para la ciudadanía”. Si la verdad es que a un niño/a, de tierna edad, se le puede manipular su opinión y su formación sin necesidad de objetar la conciencia. Y pondré un ejemplo sobre Lorca, que gracias a la ley de la memoria histórica está hoy de moda.
Una niña lleva a casa la poesía de un tal "Federico García Lorca". Quiere aprenderla de memoria. La lagarta y el lagarto.
La repasa con su madre y la aprenden de memoria. ¡Qué tío ese Lorca!... afirma la madre. Sí, contesta la niña… Lástima que se murió. Estupefacta y sorprendida, la madre replica: no hija mía, a Lorca lo asesinaron, no se murió. Lo asesinaron por ser homoxesual, por ser de izquierdas y apoyar al régimen democrático y legítimo de la segunda república frente a un golpe de estado fascista.La niña piensa....reflexiona
Mientras, su padre – que escuchaba la conversación- apunta la posibilidad de que por no dar detalles escabrosos sobre el asesinato del gran poeta, tal vez el profesorado ha decidido ocultar algunos datos a los infantes, y decir sencillamente…se murió.
Es posible…Es posible. Pero la madre, no conforme, pregunta a su hija: y a Jesús…¿Qué le pasó hija mía?....La niña sin pensarlo dos veces responde: lo mataron los romanos, le pusieron una corona de pinchos en la frente, lo clavaron con clavos en una cruz de madera y lo dejaron allí hasta que murió desangrado y de cansancio, luego un romano le clavó una lanza en el costado para ver si estaba del todo muerto…Vale hija…ya vale, es suficiente.
sábado, 19 de septiembre de 2009
Lorca murió...A Jesucristo lo mataron.
Labels:
Cultura
,
Memoria histórica
,
Reflexiones
,
Sociedad
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario