Han sido necesarias tan solo seis semanas para que ya vaya quedando meridianamente claro que Calahorra es diferente, porque quienes gracias a la ciudadanía han llegado al Ayuntamiento lo son.
Nada tiene que ver la forma de trabajar del equipo de Elisa Garrido con lo anteriormente sufrido. Así lo ha percibido con meridiana claridad la masa laboral y funcionarial del propio Ayuntamiento y lo va percibiendo poco a poco la ciudadanía.
La Agrupación Socialista de Calahorra llevaba mucho tiempo preparando un grupo de personas con el único objetivo de sacar a la segunda ciudad de La Rioja de su letargo.
El 26 mayo las urnas hablaron con contundencia y en el tiempo transcurrido entre el pasado 15 de junio y el día de hoy se han ido dando grandes pasos para revertir tendencias.
Se están solucionando asuntos pendientes, desatascando temas que llevaban años enquistados, planificando la reorganización de determinados servicios municipales para que funcionen todavía mejor... Recortando gastos para conseguir hacer más con menos y eliminando cualquier sombra de banalidad o superficialidad vacía, que había sido durante muchos años el santo y seña de la gestión municipal.
Ahora las cosas se hacen de manera diferente. Se atienden en tiempo y forma las quejas de todo el que se acerca al Ayuntamiento, se buscan soluciones y se afrontan nuevos retos para dar alicientes y futuro a la ciudad.
No tardaré mucho en hacer balance de las acciones del nuevo gobierno socialista, pero hay un asunto que por su calado y su simbolismo merece ser tratado individualmente:
Por primera vez en la historia reciente de Calahorra arrebatábamos (en justa competencia) a Navarra un evento de importancia nacional, como así es el festival musical “Holika”.
Después de muchos años viendo como era Navarra y sus poblaciones las que nos iban restando alicientes, empresas y servicios, la inercia frenaba en seco y daba marcha atrás.
El “Holika” no solamente es un evento cultural monumental, que durante todo el año va a reportar una campaña publicitaria para Calahorra…Que nos va a generar una actividad empresarial con un impacto económico de unos 2.000.000 de euros…O que va a traer a Calahorra más de 20.000 personas para ver 80 actuaciones… No. Por encima de todo, la llegada del Holika es la manifiesta constatación de que algo ha cambiado en Calahorra para mejor. Es la evidencia de una gestión que comenzamos a hilvanar hace más de un año desde el Grupo Municipal Socialista (cuando estábamos todavía en la oposición) y que ha cristalizado.
Y mientras la crisálida se ha convertido en mariposa y una parte de la oposición política hace el ridículo hablando de estupideces rancias e intrascendentes, los que gobiernan la bimilenaria ya han metido la "sexta marcha" en dirección al futuro de una ciudad que reclama el lugar que le corresponde como capital de La Ribera.
Hoy, como vemos en la fotografía de la página completa que dedica Diario de Navarra, nuestros vecinos se lamentan de haber perdido su festival.
Que no se preocupen, porque Calahorra va a potenciar su papel como capital de La Ribera a ambos lados del Ebro, y para nuestros vecinos de Navarra solo tenemos brazos abiertos y profundo agradecimiento por muchas cosas.
En Julio os esperamos aquí, en la capital de nuestro espacio económico, ambiental y social común, que llamamos “La Ribera”.
(Fotografía de la web de Medios Riojanos)
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