Matar al padre.

Según Sigmund Freud, en alguna fase del desarrollo psicológico de un ser humano este tiene la necesidad o el impulso, o tal vez el deseo contenido de “matar al padre”.  Una especie de desafío a la autoridad. 

Es el momento en el que deja de ver a su padre como un modelo perfecto de amor y sabiduría,  para colocarlo en una zona mas terrenal en la que poner al descubierto sus defectos.

Pablo Iglesias Turrión ( el menos bueno) y todo el grupo de muertos vivientes que le acompañaban -y que poco a poco fue decapitando-, vieron con meridiana claridad -en 2014- que podían capitalizar el movimiento social que surgió del 15 M, y cristalizarlo en una herramienta política para usarla como palanca de transformación.

Una vez configurada la formación PODEMOS, Iglesias intentó matar a sus dos padres. En primer lugar al Partido Comunista de España y posteriormente fantasear con desollar al siguiente…El PSOE.

Sin embargo algo pasó por el camino que le hizo perder la oportunidad de su vida, cuando tanto el Partido Comunista como Izquierda Unida se encontraban agonizantes, esperando la puntilla final.

Tras humillar al PCE y a su máximo dirigente  -Alberto Garzón-, recomendándole que se cociese en su propia sopa de estrellas trasnochadas, Iglesias finalmente abrió la mano y permitió que miembros del PCE, a través de Izquierda Unida, se integrarán en las listas electorales de PODEMOS salvando de esta manera al Partido Comunista de quedar por primera vez desde la restauración de la democracia fuera del Congreso de los Diputados.

Garzón jugó magistralmente sus bazas y consiguió no desaparecer, eso sí, doblando el espinazo y jurando lealtad eterna al nuevo líder. 

Izquierda Unida en aquellos momentos estaba en la UCI y con respiración asistida en toda España y por supuesto también en La Rioja .

Poco a poco el PCE ha ido ganando peso a la izquierda del PSOE y devorando a PODEMOS. Yolanda Díaz ha tomado el mando a nivel estatal relegando a los morados a un papel anodino e incómodo dentro de la coalición SUMAR, sentando de nuevo en un escaño del Congreso al mismísimo Secretario General del Partido Comunista de España.

Similar ha sido la película en La Rioja. Si en 2015 PODEMOS irrumpía en el parlamento regional con 4 escaños ( algo jamás logrado por los comunistas) se desinflaron rápidamente dando muestras de una incapacidad manifiesta y un comportamiento tan imprudente como injustificable. Perdían más esfuerzos en reñir entre ellos que en hacer un trabajo político de beneficio social.

Mientras tanto, los que en  aquel momento eran “muertos vivientes” de Izquierda Unida...los supervivientes de las purgas con Henar Moreno a la cabeza, afilaban sus herramientas esperando una oportunidad que ya habían dado por perdida.

2019 fue el año de la resurrección de IU. Agarrada a la coalición Unidas Podemos desembarcó Moreno en el Parlamento de La RIoja, bajo la ascendencia de Raquel Romero como imagen de la marca PODEMOS, que no tardaron en devaluar hasta límites desconocidos, siempre con la inestimable colaboración de su compañera de candidatura.

La hemorragia de votos siguió en las elecciones del 2023, si bien en esta ocasión los comunistas ya se habían hecho con el primer puesto de la candidatura, relegando al segundo al representante de PODEMOS -Raúl Pérez-, que ahora dimite dejando paso libre al siguiente que (casualidades de la vida) corresponde a Izquierda Unida, por lo que salvo un gesto de cortesía de los comunistas hacia PODEMOS para que corra la lista ( jajaja) ya se puede dar por muerto y enterrado en La Rioja a PODEMOS.

IU consigue ahora sentar a dos miembros de la familia en el parlamento, pasando del cementerio a la gloria en tan solo 4 años, al tiempo que borra del mapa a su peor enemigo y competidor, y todo ello seguramente con menos del 3% del voto escrutado….Me descubro ante ellos.

Esta es la historia del hijo que no pudo matar al padre y terminó devorado.