lunes, 23 de septiembre de 2024

Como Capellán fuera del agua

El próximo 27 de septiembre el ínclito y maravilloso -el de los dedos vertiginosos- Gonzalo Capellán, está citado en el palacio de la Moncloa como presidente de La Rioja para reunirse con el presidente del Gobierno de España, al que últimamente insulta con toda soltura un día sí y otro también.

No destaco por ser excesivamente empático, pero haciendo el soberano esfuerzo de ponerme en su lugar, me parece que Gonzalo va a encontrarse “muy poco a gusto” frente al presidente del Gobierno de España. Casi tan incómodo como cuando le obligan a sonreír, a besar ancianas o a asistir a una corrida de toros.
Tendrá que renegar entre otras cosas de ese artículo del Estatuto de Autonomía de La Rioja (el 46) que reconoce la legitimidad de nuestra comunidad para negociar de forma bilateral con el Gobierno de España, para recibir compensaciones frente a ésos -ciertos, reales y sostenidos en el tiempo- agravios de infrafinanciación que venimos sufriendo desde hace décadas por los conciertos vasco y navarro. Unos fueros arcaicos que últimamente se han hecho invisibles para la derecha y la ultraderecha riojana, y que son por lo menos tan malos -o tan buenos- como cualquier otro que se pretenda poner en marcha.

Capellán hace semanas que ha claudicado. Nada queda ya de su elegancia inicial. Ha dejado de ser el presidente de todas y todos. Ahora abraza con disciplina militar los mandamientos de su partido en Madrid, y repite al pie de la letra lo que la teniente Gamarra le dicta.

El próximo viernes en Madrid será un pececillo fuera del agua, que se irá hundiendo en el sofá de la Moncloa frente a un auténtico titán político. Sabedor de que Sánchez seguramente se habrá leído la parte más interesante del burdo discurso con el que nos obsequió el día del pisado de la uva. Un discurso sectario, partidista y faltón, en el que insultó a la inteligencia humana, a la ciudad de Logroño y a todo aquel riojano o riojana que no piense como él… incluidas las comadrejas.

Y mientras esto acontece, el PP de Feijoo sigue amenazando con no votar a favor en el Congreso la senda de estabilidad financiera, lo que supondrá una pérdida de 50.000.000 € para La Rioja y sus ayuntamientos…. Aunque no hay que preocuparse,  siempre nos quedará Capellán citando a Heráclito de Éfeso.